Cuando muchos compañeros de vanguardia, más jóvenes que él, ya estaban fijados en poses históricas, Girondo no renegaba de su responsabilidad más alta, que era con el lenguaje, es decir, con la poesía. Esta edición de las obras incluye todos los volúmenes aparecidos hasta 1968 -en textos revisados según la primera edición y con las correcciones manuscritas del autor-, algunas colaboraciones publicadas sólo en periódicos (como los célebres membretes) y aquellos inéditos que el autor había alcanzado a corregir. Un prólogo de Enrique Molina, una cronología y abundantes ilustraciones tomadas de las primeras ediciones la completan.