El artista italiano Lucio Fontana hizo trizas, literalmente, el arte establecido. Formado como escultor, combinó forma y color en gestos espaciales radicales. Sus lienzos rasgados de las décadas de 1950 y 1960 son sus obras más conocidas. Considerado padre del espacialismo de mediados del siglo XX, su práctica provocadora llevó la innovación de posguerra hacia una novedosa síntesis de arte, tecnología y ciencia.