Martín Castillo es una de las diez mil personas trans que viven en Colombia. Nació en Bogotá como Yasmín y se crio como niña en Muzo, en la zona esmeraldífera de Boyacá. Ya desde entonces se sentía diferente a las demás y en su interior se creía un niño. Crecer con esta dualidad en una zona rural, conservadora y con una fuerte cultura machista fue muy complejo. Vivió y conoció de cerca varios tipos de violencia antes de llegar a la capital del país, donde sola, sin familia y sin dinero, tampoco la tuvo fácil mientras poco a poco se transformó en Martín.