La historia de la humanidad es el relato de una larga invención. Siempre se ha dicho que los seres humanos no viven en el medio natural, sino que lo transforman para sobrevivir. La inteligencia del hombre reemplaza el instinto y las garras de los animales o la fuerza de la naturaleza. Desde tiempos remotos, los humanos avanzamos a golpe de primeras veces, que, situadas en su contexto cronológico, permiten descifrar algunas de las grandes etapas evolutivas de nuestro comportamiento: hubo una primera vez en la que alguien encendió un fuego, construyó una cabaña, ideó una herramienta, se vistió, transmitió un conocimiento, decidió migrar en busca de un lugar mejor o esbozó una pintura.