Misión en Hong Kong se enmarca en el contexto de los conocidos años de plomo italianos, en la década de 1970. El neofascismo y el terror llevaron al nacimiento de grupos revolucionarios estudiantiles y obreros, lo que hace de estas década una guerra interminable. Dentro de los límites de la normalidad, no parecía sorprendente ser secuestrado para una misión secreta en Hong Kong. El protagonista, Mauro, que es el nombre literario de Marco, un joven de diecinueve años, parece más extasiado por encontrar su destino en las experiencias asiáticas que por cumplir una misión impuesta.
Este libro nos transporta a paisajes asombrosos de templos religiosos, y a realidades dolorosas de muerte, perversión y agentes secretos. Mauro emprenderá, junto con su compañero de misión, Jordan, un viaje desconocido en el que podrá conocer los lugares en los que estuvo y murió su ídolo: Bruce Lee, quien tuvo una partida prematura y sospechosa, y será investigada por su curiosidad y audacia.
Las pasiones juveniles conducirán a Mauro por el camino de la exploración de su sexualidad y el consumo de sustancias, lo que le permitirá concebir y experimentar distintas realidades. Así mismo entenderá, a través de su militancia en el Ala creativa del Movimiento de 1977, la importancia de la denuncia a los medios de comunicación y a los gobiernos autoritarios que manipulan a la población.