Luego de décadas de gobiernos autoritarios, a partir de los años ochenta los países de América Latina fueron progresivamente uniéndose al campo democrático. Sin embargo, estas denuncias restauradas no constituyen regímenes totalmente representativos, son las herederas de las dictaduras, cuando no sus prisioneras. Tal como sostiene Alain Rouquié: "La democracia no está inscrita en la naturaleza. Es una construcción cultural compleja, azarosa, que avanza por ensayo y error". En A la sombra de las dictaduras, el autor intenta captar en su génesis y su singularidad los múltiples desafíos que enfrenta la democracia en América Latina. De manera clara y precisa presenta, a partir de la experiencia latinoamericana, elementos de reflexión sobre el sistema democrático, sus paradojas y sus límites.