En esta novela brillante, Stephen King acompaña al lector en un viaje
maravilloso al pasado y en un intento de cambiar lo que pasó. Nos ofrece
un impecable retrato social, político y cultural del final de los años
50 y principios de los 60; un mundo marcado por coches enormes, Elvis
Presley y el humo de los cigarrillos que flota por todas partes. Todo
empieza con Jake Epping, profesor de inglés en el instituto de Lisbon
Falls, Maine, que se gana un sueldo extra con clases nocturnas para
adultos. Un día les pide a sus estudiantes que escriban sobre un
acontecimiento que les haya cambiado la vida, y una de estas redacciones
le impactará profundamente: la historia cruenta de una noche de hace
cincuenta años cuando el padre de Harry Dunning volvió a casa para matar
a su madre, hermano y hermana con un martillo.
Al leer esta redacción algo cambia en Jake; su vida, igual que aquel día
en Dallas de 1963, cambia por completo en tan solo un instante. Poco
después su amigo Al, propietario de un diner en su barrio, le descubre
un secreto: en el almacén hay una puerta que conduce al pasado, a un día
en particular del año 1958. Y Al le pide a Jake que le ayude con una
misión que le obsesiona: impedir el asesinato de Kennedy.
Y así comienza la nueva vida de Jake como George Amberson, en un mundo
muy diferente. En él, George se enamorará mientras sigue el rastro de
Lee Harvey Oswald hacia un momento histórico que quizás ahora nunca se
produzca.
Un viaje al pasado nunca ha sido tan creíble, ni tan terrorífico.