MENTION-SCHAAR, MARIE-CASTILLE
A los 17 años, Sonia casi dejó a su familia para ir a la yihad. Estaba convencida que ésta era la única manera de que ella y su familia irían al cielo y se obsesionó por ser una mártir. A diferencia de Melanie, de 16 años de edad, criada por su madre; era una adolescente sin antecedentes, que compartía su tiempo entre la escuela sus amigos y sus clases de víoloncello. En efecto, en internet comenzó a conversar con un "príncipe" que logró lavar su cerebro. Llenos de culpa por no haber visto nada, los familiares ven con impotencia la metamorfosis de sus hijas.