Todo parece venirse abajo Allie está furiosa y desorientada. Siente la constante amenaza de un espía infiltrado en la Academia de Cimmeria. Pero no es la única que se encuentra así, todo parece derrumbarse en la escuela: los estudiantes no entienden qué está ocurriendo, los profesores se enfrentan unos a otros y las reglas han comenzado a perder fuerza. Cuando Nathaniel revela su plan, la directora, Isabelle, deja de tener control sobre la academia, pero también sobre la Night School y toda la organización que la sustenta. El miedo ha invadido el lugar y la amenaza está próxima. No se puede confiar en nadie: ya nadie está salvo. Esta vez Nathaniel no representa una amenaza para los alumnos de Cimmeria; ellos mismos se han convertido ahora en la verdadera amenaza.