A finales de 1983 el cantante Elkin Ramírez, fue invitado a cantar por un grupo que imitaba versiones originales de agrupaciones reconocidas. Conformado por Hugo Restrepo (guitarra), Jorge Atehortua (bajo), Jaime Tobón (guitarra rítmica) y Gonzalo Vásquez (batería). Elkin Ramírez desde antes venia formándose como vocalista en otras agrupaciones, perfeccionando así su estilo lírico. Elkin se inició en 1981 con Lemon Juice, pasando a Hertz en 1982 y luego alternando en Kripzy y en Ferrotrack en 1983, donde estuvo al lado de grandes músicos del momento como Hernán Cruz y Gustavo Corrales. La banda nace oficialmente el 18 de junio de 1984 con el nombre de Kraken, con un repertorio de temas interpretados pero con algo característico, las composiciones eran en español. El inicio de este proyecto se plasmó con el concierto de lanzamiento oficial en Medellín, en el teatro Lux de Manrique, el 22 de septiembre de 1984 ante 1200 personas. Para 1985 se retira el guitarrista rítmico Jaime Tobón, reemplazándolo Ricardo Posada con quien ya Elkin había trabajado en Kripzy. El grupo adquirió carácter, fuerza y credibilidad musical, teniendo como objetivo inmediato componer. Nacen entonces las primeras canciones: «Nada ha cambiado aún», «Todo Hombre es una Historia» y «Muere Libre», temas con un sonido con gran influencia del heavy metal y el hard rock. En la Plaza de Toros La Macarena de Medellín en 1986, Kraken se presenta al lado de la agrupación brasilera Santuario, ante 6000 asistentes, que cantaban al unísono sus temas inéditos. Grabaciones piratas de sus temas ya habían sido distribuidas en todo el país y aprendidas por sus nacientes fanáticos, siendo Kraken desde entonces y hasta ahora una de las bandas de rock más representativas de Colombia. Kraken II: Conquista de la fama nacional La grabación del disco Kraken II en términos generales se elaboró pensando en un público roquero más universal. Su composición tomo un tiempo récord para los integrantes de la agrupación, pues debían cumplir con sus presentaciones en vivo y con la producción de todo el material que debían crear y seleccionar. La propuesta de incluir un teclista, Jaime Ochoa Lalinde, como miembro de la banda en reemplazo de su exguitarrista líder, Ricardo "Richi" Restrepo, se determinó por la necesidad de encontrar un sonido más acorde a sus influencias y objetivos musicales, logrando unificar y madurar al ritmo de las bandas roqueras internacionales del momento y asumiendo el proceso responsable que esto exigía. Se internaron nuevamente en un estudio independiente bajo la mirada del sello tradicional que aún tenía sus derechos. Por primera vez en la historia del Rock en Colombia, el tema «Vestido de Cristal» entre 1989 y 1990 logró convertirse en el tema número uno en todas las emisoras juveniles nacionales. La inclusión de los teclados fue determinante y definitiva para este álbum y a pesar de las críticas y los temores por la inclusión de este instrumento, la banda no vaciló en hacerlo parte de su nueva fórmula de sonido. Ya no se trataba simplemente de mantener el sonido original de "banda local de garaje". El objetivo era el de avanzar para ser una banda representativa a nivel nacional en proceso de convertirse a futuro en una banda internacional. El año 1990 tuvo grandes retos que superar y fue testigo de la composición, grabación y producción de Kraken III, álbum que se logró con un sonido más contundente y maduro, netamente roquero.2? Temas como «Rostros Ocultos» e «Hijos del Sur» se convirtieron en nuevos himnos sin hacerse notar al principio de su publicación. El primero, se mantuvo encabezando listas durante varias semanas a nivel nacional, y permitió nuevamente una nueva gira, la cual incluyó un gran evento denominado Concierto de la Independencia, el sábado 19 de julio de 1991 en la Plaza de Toros La Macarena de la ciudad de Medellín, en el marco de la celebración del día de la Independencia de Colombia. Este gran evento estuvo acompañado de diferentes pensamientos y exposiciones para resaltar y reclamar por el derecho a la libre expresión..3? Otro de los temas musicales importantes de este álbum como «Lagrimas de Fuego», en su inicio propuesto musicalmente por el teclista Jaime Ochoa Lalinde, se convirtió en la balada preferida de la banda por el efecto impactante y profundo que Elkin Ramírez logró en la composición de la letra. Una vez más la banda lograba, a través de la composición de baladas de rock profundo contemporáneo, demostrar su gran aceptación en los corazones de sus seguidores totalmente identificados con el sentimiento de dichas melodías y letras.